Las actividades comerciales están reanudando y con esto la curva de contagios por COVID-19 incrementa en el país. En medio de toda la crisis una de las industrias que no ha podido cesar su operación es la industria textil puesto que es una de las facilitadoras para que los contagios se disminuyan con la implementación de telas que se usan para la fabricación de tapabocas.

Pero con todo este cambio mundial esta industria textil ha tenido que evolucionar más rápidamente que de costumbre para cubrir las necesidades del mercado.

El Coronavirus ha cambiado para siempre la industria de la moda. Hace pocos días se conoció la noticia de que marcas como Gucci han renunciado a lanzar su colección cada 3 meses en el cambio de estacional para ahora lanzar al mercado sus colecciones solo dos veces al año.  A esta tendencia se han sumado Giorgio Armani y Saint Laurent que insisten en que la ropa debe tener una vida más larga.

Pero en nuestro continente donde no hay temporadas hemos implementados cambios simples pero poderosos ante esta crisis.

En el caso de la industria colombiana muchas marcas han adoptado implementar la producción de tapabocas para continuar con su presencia en el mercado y contribuyendo a la crisis sanitaria.  Algunas de ellas por ejemplo han evolucionado este concepto, diseñando prendas adaptables no solo a la crisis de COVID-19 si no también a la vida diaria. Estas llamadas chaquetas de protección son chaquetas anti-fluido con chompa y tapabocas.

Algunas marcas que se han sumado a esta innovación son: Talulah, Babalú, Brisa Mar, Polito, Leonisa, Totto, Style h Jeans, Arturo Calle.